Microrrelato: CALIDAD Y
CANTIDAD – Alejandro Jodorowsky
No se enamoró de ella, sino de su sombra. La iba a visitar al alba,
cuando su amada era más larga.
La
sombra del amor
Amanecía
lento aquella mañana y el poeta despertaba sorprendidamente bajo el árbol. Su
cuerpo yacía desparramado sobre el pasto y su mente buscaba y rebuscaba la
explicación por la cual se encontraba allí y no en su cama.
De
repente, observando a su alrededor, encontró una rosa, de color rojo furioso,
de forma exótica y un perfume penetrante. Encontró también su cuaderno y pluma,
e inspirado por aquella bella flor, comenzó a escribir unos versos.
Las
mañanas siguientes frecuentó sin falta aquel lugar y le dedicaba unas líneas
diarias. La iba a visitar al alba cuando
su amada era más larga.
Días
después, el poeta desapareció. Sus allegados buscaron entre sus cosas y
encontraron un cuaderno lleno de versos destinados a su amada. En todos esos
suspiros estaba presente “la rosa”, pero el
poeta no se enamoró de ella, sino de su sombra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario